Somos agua y la usamos para la mayoría de nuestras actividades. La Gestión Integrada de los Recursos Hídricos es un camino para asegurar que todos tengamos acceso. Si miramos el agua con el lente de la ciencia, veremos que no hay una sola. Existen varias clasificaciones de acuerdo a su composición, fuente o uso. Salada o dulce. De mares, ríos, glaciares, acuíferos o lagos. Potabilizada, residual, para riego, transporte o recreación. Como vemos, en realidad son muchas aguas. El agua dulce, que utilizan muchos ecosistemas y los seres humanos, es un recurso escaso. Su uso debe hacerse con responsabilidad. ¿Recuerdan el ciclo del agua? Llueve, el agua fluye a los ríos y se evapora. Pero, ¿qué pasa cuando agregamos otros elementos?: riego, saneamiento, transporte, potabilización, tratamiento de aguas residuales, fuentes de agua compartidas por países, participación de la sociedad, entre muchos factores. Aquel ciclo se vuelve más complejo. Los expertos lograron unificar todos los elemen
Un acuífero es una formación geológica subterránea que alberga agua. En condiciones normales, estas r eservas de agua dulce permanecen en contacto con el agua salada del mar, manteniendo cierta relación de equilibrio. Sin embargo, diferentes causas, naturales (como las bajas precipitacion es) o antrópicas (como la sobreexplotación de los acuíferos o los vertidos de la salmuera producto de las actividades de desalinización), desencadenan o aceleran los procesos de salinización de los acuíferos. Acuífero Guaraní, la reserva de agua dulce más grande del planeta La salinización implica un incremento de la concentración de sales y minerales de las aguas subterráneas, que deteriora sus parámetros de calidad. Además del aumento de la salinización de los acuíferos costeros debido a la subida del nivel del mar (y a la presión turística y urbana, por qué negarlo), hay otras amenazas que deberían preocuparnos. Quizás algunos a estas alturas aún quieren creer que el deshielo de los polos que p